Mamografía: Qué es y para qué sirve
La mamografía es una técnica de exploración de las mamas que utiliza rayos X. Esta prueba ginecológica sirve para obtener imágenes que se emplean en el diagnóstico de enfermedades o patologías mamarias.
La mamografía sirve para explorar las mamas con alguna de estas dos finalidades:
- Completar el estudio de las mamas cuando la mujer tiene síntomas o signos sugestivos de tener una enfermedad mamaria como un nódulo, una dureza, una retracción en la piel, etc.
- Detectar precozmente la existencia de una lesión precancerosa o un cáncer de mama que aún no había producido síntomas ni signos de sospecha. Se denomina en este caso, mamografía de cribado o screening, que es la utilizada en las campañas de detección precoz del cáncer de mama.
Mamografía bilateral
La mamografía bilateral consiste en explorar las dos mamas. Tiene la utilidad de comparar las características y los hallazgos en las dos mamas como sucede, por ejemplo, en las asimetrías mamarias.
Cuando se realiza mamografía de una sola mama se denomina mamografía unilateral o monolateral. Se indica cuando es necesario controlar la evolución de un hallazgo dudoso en una sola mama y se suele realizar a los 6 o 12 meses de la mamografía bilateral anterior. También se emplea para controlar la mama sana que queda después de extirpar la mama del otro lado afectada por un cáncer.
Cuándo realizar la mamografía
Es posible que te preguntes cuando se debe realizar la primera mamografía. Está en función de la edad y de si se es portadora de factores de riesgo para padecer un cáncer de mama.
El criterio más utilizado por la mayoría de las Sociedades médicas de Senología y Patología mamaria es comenzar a realizar la mamografía a los 40 años, salvo existencia de factores de alto riesgo para padecer un cáncer de mama, en cuyo caso, se comenzaría entre los 35 y los 40 años.
Para las campañas de detección precoz del cáncer de mama se suele realizar una mamografía de cribado o screening cada 2 años.
Cada cuánto tiempo realizar la mamografía
Existen varios criterios. Puede realizarse cada 1 o 2 años, dependiendo de los factores de riesgo de cáncer de mama y si se tienen antecedente de padecer previamente una lesión mamaria premaligna o un cáncer de mama.
Campañas de detección precoz del cáncer de mama
Las campañas de detección precoz con mamografía programada periódicamente a determinados grupos de población son muy importantes pues ayudan a diagnosticar cáncer asintomático. Se denomina también mamografía de cribado o mamografía de screening.
Gracias a estas campañas de detección del cáncer de mama mediante mamografía se realiza un diagnóstico y tratamiento más temprano con buenos resultados y se consigue un buen pronóstico. También, gracias a estas campañas, se redujo el número de extirpaciones de la mama y los tratamientos con quimioterapia.
Gracias a la detección precoz mediante mamografía se aumentó de modo considerable la supervivencia en casos de cáncer de mama.
En condiciones normales, debes comenzar a realizar la mamografía periódica o programada a los 40 años de edad, repitiéndola cada 2 años y sin límite de edad, porque el cáncer de mama se puede presentar incluso después de los 70 años.
Mamografía tomosíntesis 3D y mamografía digital
La técnica utilizada hace unos años para realizar la mamografía mejoró con la aparición de la mamografía digital 2D que aumentó la precisión diagnóstica de esta técnica de exploración sobre todo en mamas densas. Además, la mamografía digital permite almacenar las imágenes digitalizadas y enviarlas a distancia por correo electrónico.
Posteriormente, la técnica, la precisión y la sensibilidad de la mamografía digital 2D fueron superadas por la aparición de la técnica de mamografía tomosíntesis 3D. Esta técnica mamográfica obtiene múltiples planos paralelos de la mama, similares a los obtenidos en los TAC o tomografías axiales.
La mamografía tomosíntesis o 3D proporciona una mayor detección de lesiones mamarias, obtiene una mejoría de la sensibilidad y mayor precisión para visualizar las características de las lesiones.
Por qué te indican hacer una mamografía tomosíntesis 3D
Cuando el ginecólogo te indica una mamografía tomosíntesis 3D puede ser debido a alguna de las siguientes causas:
- Por que han surgido dudas en el resultado de la exploración a través de una mamografía digital 2D.
- Por obtener un mayor detalle y sensibilidad en las imágenes para detectar lesiones mamarias, sobre todo en mamas radiológicamente densas.
- Porque al realizar la mamografía tomosíntesis 3D, existen otras ventajas adicionales como:
- Mayor exactitud para definir la forma, el tamaño y para localizar con mayor precisión las lesiones en la mama.
- Permite detectar y estudiar mejor los tumores o lesiones múltiples en las mamas.
- Evita la realización de pruebas adicionales como la Resonancia magnética RMN de mama y biopsias de mama innecesarias.
Mamografía: Edad y riesgos
En la actualidad, en condiciones normales, se recomienda comenzar a realizar una mamografía periódica a partir de los 40 años. Se ha demostrado estadísticamente que la realización de mamografías disminuye el riesgo de morir de cáncer de mama en un 35% en mujeres mayores de 50 años y algo menos del 35% en las de 40 a 50 años.
En cuanto al riesgo de los Rayos X y la radiación recibida en la realización de la mamografía, tanto a nivel de las mamas como por la radiación difusa que llega a otros órganos, no existen riesgos importantes para la salud. No obstante se debe utilizar la mínima dosis de radiación posible, pero que sea la suficiente para obtener las mejores imágenes para la valoración de las mamas.
Aunque exista una mínima probabilidad de efectos secundarios por la radiación utilizada en la mamografía hay que tener en cuenta el enorme beneficio que supone la detección de un cáncer de mama y sobre todo la detección precoz del mismo. Esto supone una disminución de la mortalidad y un aumento de la supervivencia. Por tanto, el riesgo mínimo de la exposición a radiación se compensa con el gran beneficio obtenido por una detección temprana del cáncer de mama que puede incluso evitar la extirpación de la mama y, en ocasiones, evitar la quimioterapia.